8/26/2007

Record en Saranda

Aqui esta el amigo Edgar Guanchez, conocido como "Sensei" con el nuevo record de Saranda Resort un pavon de 19 Lbs.



Felicitaciones Sensei por ese hermoso pavon.





Record en Saranda Resort por Edgar Guanchez ( Sensei )
Ruta Caracas - Puerto Ordaz - El Manteco
Salida a bordo de mi Grand Cherokee a las 7:30 am del día miércoles 15-8-07
Todo se inició como cualquier viaje familiar, en compañía de mi esposa Tatiana y mi hijo Sebastián, de 10 años, después de pasar un día en Ciudad Guayana con mis amigos del Club Guayana, Alberto Albornoz, Carlos Mesa, Enrique Cenci y el popular Caribe. El día jueves 16 nos levantamos muy temprano y partimos hacia El Manteco, contando con la ayuda de un GPS en el cual colocamos la ruta hacia Saranda. Después de 2 horas de viaje llegamos a nuestro destino. Al abrir el portón principal mi familia sintió lo mismo que yo cuando estuve en Saranda por primera vez en el año 2004: una sensación de asombro ante la exuberante belleza que ofrece este sitio. Después de acomodar nuestras cosas en la habitación, almorzamos y nos fuimos a pescar.
Las primeras jornadas de pesca nos sirvieron de relajación y práctica, capturando algunos ejemplares de 9, 11, 12 y 14 libras. Pero yo esperaba el día en que iríamos hacia San Pedro de las Bocas ya que ni Tatiana ni Sebastián habían podido pescar, sólo tuvieron algunos strikes que no pudieron capturar.
Llego el día, y mi esposa e hijo decidieron que pescarían por la tarde, y que nos encontraríamos en el punto de almuerzo. Desayuné a las 5:00 am en compañía de una banda de 10 maracuchos que iban a pescar en la misma zona. Una vez en el bote, con Alberto, mi guía, con quien he ganado en varias ocasiones “el pavón del mes” y unos cuantos torneos de “Las Mandarinas”, me doy cuenta que dejé en la habitación mi caja de señuelos de propelas, los cuales eran los que mejor habían funcionado, a lo que Alberto me comenta: “Bueno, vaya pensando qué otro señuelo de superficie va a poner.”
Una vez en el sitio conocido como “Costa Rica”, muy cerca del cerro La Paila, y una vez apagados los motores de gasolina y puesto en marcha el trolling, comencé a lanzar un señuelo Hidro Popper de Yo- Zuri color bronce que tenía montado en una caña G-Loomis MBR783C de 6.6 con un carrete Shimano Chronarch 101. Entonces Alberto me dice: “No se ven las sardinas moviéndose como ayer”. Después de varias lanzadas y un par de strikes le respondo que tiene razón y que el día está un poco nublado. Inmediatamente el guía me dice: “mire, allá lejos están saltando las sardinas, póngase los polarizados”. Así lo hice y me coloqué mis lentes Costa del Mar y pude ver el movimiento a lo lejos. “Hay que lanzarles a distancia”, me dice Alberto y en seguida cambié mi equipo anterior por una G-Loomis MBR784C, que lanza hasta 1oz, combinada con un Shimano Chronarch MG 51 cargado con línea multifilamento Power Pro de 20 lb color Phantom Red.
Este equipo era un poco más robusto. Además tenía montado un Tango Dancer Cultiva de la casa Owner. Este señuelo era más pesado y con él podía alcanzar una mayor distancia. Lancé mi señuelo y cayó un poco a la izquierda de donde estaba el movimiento de las sardinas: comencé a recoger y al segundo movimiento se produjo un fuerte remolino de succión. No hubo una gran explosión pero inmediatamente se arqueó mi caña y el pavón se hundió dando un gran coletazo lo que me indicó que había atrapado mi señuelo. Luego y después de dos clavadas se fue al único tronco cercano que había en la zona dando una vuelta a la línea. A pesar de esto seguía sacando el Multifilamento de mi Chronarch. Alberto me dice: “Voy a acercarme al tronco, el pavón no está empalado y sólo tiene una vuelta de la línea”. Entonces, como a tres metros del tronco saltó el monstruo y Alberto me gritó: “Sensei, ¡tiene como 15 libras!”. En eso logramos liberar la línea y comenzó la batalla. En cuanto pude acercar por primera vez el pavón a la lancha le dije a Alberto: “¡Éste tiene más de 16 libras!” Después de una tercera acercada al bote y mucha descarga de adrenalina por fin el guía Alberto lo atrapó con la malla, y al sentir el peso dijo: “Tiene como unas 18 libras”. Le sacamos el señuelo y de inmediato lo pesamos con el Boga Grip, dando 20 lb de peso en ese momento. Entonces Alberto me comentó, “Sensei, déjeme decirle que acaba de tumbar el Record de Saranda!”
En eso, llamamos por radio para que alguna lancha se acercara a certificar el peso y respondió una que estaba en La Morea, sitio muy cercano de donde estábamos. Llegó con la banda de los maracuchos. Entre fotos y videos lo pesamos en dos pesos diferentes dando en uno de ellos 19.5 lb y en el otro 19 lb. En ese momento otra lancha que escuchó el mensaje nos comunicó que estaban cerca y que querían ver al monstruo. Llegó muy rápido la otra lancha con el resto de los maracuchos, y pudimos pesar el pavón en otra balanza dando como resultado 19 lbs. Y así se quedó. ¡19 libras!.
Preocupado por la vida de mi pavón después de tantas fotos, lo devolví en el mismo lugar donde lo capturé y se fue nadando lentamente buscando las profundidades.
Al llegar al campamento para almorzar ya los otros guías sabían la noticia. Me reuní a comer con mi familia y la banda de los maracuchos. Las felicitaciones de rigor y demás preguntas y comentarios no se hicieron esperar. Y salimos a pescar, esta vez en compañía de mi esposa y mi hijo. Ya yo ni quería pescar más. Estaba sobrado. Esta media jornada la dediqué a que ellos pescaran, y resultó en un pavón de 8.5 lb que pescó Tatiana y uno de 9.5 lb que pescó mi hijo, ambos con las excelentes Propelas que fabrica mi amigo Charles Hammontree, “el gringo”, aquí en Venezuela.

Sebastian con su pavon.


Sebastian y el guia Alberto.



Tatiana con su pavon.



La jornada culminó con una celebración en Saranda y la alegría de los empleados del lugar ya que por vez primera entraba un venezolano en los records de Saranda Resort.

Lic. Edgar Guánchez
Arawana Outdoor Gerente General